Ingredientes
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3 cucharadas Ras El Hanout
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600 gr cordero en trozos
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1 l caldo de carne
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1 Calabacín
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1 Cebolla
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2 Patatas
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4 zanahorias
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600 gr couscous
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sal y pimienta
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1 pastilla caldo de polloopcional
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Introducción
La cocina marroquí es muy tradicional, de esas que se hace al chup chup con buenos ingredientes y mucho cariño, sin demasiadas florituras. El cous cous es probablemente una de las recetas más populares que ha llegado a nuestras cocinas, así que hemos pensado que vale la pena daros la receta para poder preparar este pedazo de plato que además de estar buenísimo, es súper completo y equilibrado.
Lo ideal es prepararlo en un tajine, pero dado que no muchos tenemos esta especie de horno tradicional en casa, vamos a prepararlo con una cazuela normal.
Preparación:
Comenzamos dorando el cordero en una olla con un poco de aceite. Espolvoreamos con el ras el hanout por encima y con un poco de sal y pimienta, y sofreimos junto a la cebolla picada. Dejamos cocer durante unos 45 minutos.
Al cabo de ese tiempo, agregamos las verduras peladas y cortadas en trozos grandes (a lo largo, las zanahorias simplemente las pelamos) y el caldo y dejamos cocer a fuego lento unos 20 minutos más.
Mientras se termina el cordero vamos preparando el cous cous. Normalmente yo utilizo cous cous “rápido” que no necesita preparación previa, pero el tradicional necesita que lo hidratemos en un bowl durante unos 5 minutos con un poco de agua y aceite de oliva.
Ponemos el cous cous en una cazuela, cubrimos con agua fría y dejamos que hierva (aquí es donde pondríamos la pastilla de caldo si queremos, si no, con sal llega). Dejamos reposar durante unos 5-10 minutos y deberíamos tenerlo listo ya. Probadlo por si no está a vuestro gusto, según el fabricante puede estar todavía un poco duro y necesitar un par de minutos más de hervor.
Escurrimos, pasamos por agua fría, volvemos a escurrir y colocamos en una fuente redonda como una cama.
En el centro ponemos la carne de cordero (a ser posible, sin huesos) y a los lados, como si estuviéramos construyendo una cúpula, ponemos las verduras. Regamos con un poco de caldo del cordero y dejamos el resto en una salsera donde puedan ponerse más los comensales a su gusto. Llevamos a la mesa y a gozar de una experiencia de las mil y una noches 😉
Si os gusta el cordero, aquí tenéis una rica receta de caldereta de cordero.