Ingredientes
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1 kilo de costillas de cerdo sin adobar
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40 ml de sirope de arceSi no lo encontráis, aunque vale la pena liarse un poco, podéis poner miel, usad en este caso un pelín menos
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30 ml de salsa de soja
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1 cucharada de cebolla en polvo
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2 clavos de olor
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1 cucharada de pimienta negra molida
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1 cucharadita de canela
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1 cucharadita de pimentón
Introducción
La olla lenta, también llamada slowcooker (o crockpot por el nombre de la marca más famosa que las fabrica) es un inventazo que goza de un auténtico boom en nuestro país desde hace unos años. En otro post hablaré largo y tendido sobre las bondades de este aparato, pero para los que no lo conozcáis, solo deciros que no hay nada que haga mejor los guisos o que deje más tiernas las carnes. Además, no es caro, así que estáis tardando 😉
A lo que vamos hoy, que es una recetaza de costillas caramelizadas con sirope de arce. Lo más complicado de esta receta es encontrar el sirope de arce (aunque está en todas las grandes superficies, y supermercados con comida internacional), lo demás es tan sencillo que no tiene forma posible de equivocación. Os va a encantar, la carne se separa del hueso y eso sí, id preparando toallitas a montones porque son pegajosillas y os vais a pasar un rato chupándoos los dedillos 😉
Preparación:
Ponemos el sirope, la salsa de soja y las especias en la olla y removemos hasta que se integren un poco los ingredientes.
Añadimos las costillas y las embadurnamos bien con la mezcla. Las colocamos de forma que estén en contacto con la salsa lo mejor posible y programamos 8 horas en low. Como a las 4 horas damos la vuelta a las costillas para que se impregnen bien ambas caras de la carne.
Ya las tenemos listas para llevar a la mesa y disfrutar de lo lindo, pero si lo queremos bordar, podemos retirar la salsa sobrante de la olla lenta y ponerla en un cazo a hervir. Removemos frecuentemente para que no se pegue y no se queme en el fondo, y vamos espesándola hasta conseguir la textura del caramelo.
Cuando tengamos la textura deseada, pintamos con ella las costillas y ahora sí… ¡¡A GOZAR COMO LOCOS!!