Ingredientes
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2 grandes Berenjena
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200 gr Queso rallado
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Aceite de oliva virgen
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pan rallado
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1 Huevo
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o Ragú casero Salsa boloñesa
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sal y pimienta
Introducción
Esta receta es un plato único delicioso, un poco laborioso quizás, pero compensa totalmente el pequeño esfuerzo. Además, gusta a niños y a mayores y se puede preparar de un día para otro y llevar en un tupper para el trabajo. A mi me llevan directamente a Argentina, al restaurante Croxy, donde te sirven unas milanesas de esas de ponerles un monumento… si seguimos todos los pasos tendremos una receta de 10 para toda la familia, ¡vamos allá!
Preparación:
Lavamos las berenjenas y las cortamos en rodajas alargadas como de medio centímetro. Las introducimos en un recipiente con agua y sal y las dejamos allí durante unos 30 minutos. Esto quitará el amargor del vegetal.
Las sacamos del agua, las secamos con un paño, salpimentamos y reservamos.
Ponemos pan rallado en un plato y el huevo batido en otro y procedemos a empanar las rodajas de berenjena (primero las pasamos por el huevo y luego por el pan).
Calentamos un dedo de aceite de oliva y vamos friendo las rodajas por los dos lados hasta que queden ligeramente doraditas. Las ponemos sobre papel de cocina y dejamos que se absorba el exceso de aceite.
Precalentamos el horno a 180º
Ponemos las berenjenas extendidas sobre una bandeja del horno y ponemos sobre cada una de ellas una generosa cantidad de salsa boloñesa (o nuestro ragú casero, todavía mejor). Extendemos hasta formar una especie de base de pizza y terminamos poniendo también el queso rallado encima.
Llevamos al horno durante unos 15-20 minutos hasta que se funde bien el queso y ya tenemos listas las milanesas para llevar a la mesa…. Espectaculares, que las disfrutéis. Y si queréis podéis probar esta receta de milanesa de pollo al Parmesano.
