Ingredientes
-
600 gr carne picada de ternera
-
200 gr carne picada de cerdo
-
1 rebanada pan de molde
-
1 Huevo
-
1 cucharadita de ajo en polvo
-
1 cucharadita nuez moscada
-
10 ml Leche
-
6 aceitunas picadas
-
1 pellizco de canela
-
2 cebollas blancas
-
4 zanahorias
-
2 dientes de ajo picado
-
1 tomate
-
1 Vaso de vino blanco (Albariño
-
1 chorrito de aceite de oliva virgen
-
sal y pimienta
-
1 Pellizco de harina
-
1 vaso caldo de carne
Introducción
¿Tenéis ganas de un plato tradicional, contundente y generoso? Pues estas albóndigas son de esas recetas que os devuelven a la cocina de nuestras abuelas, donde los platos se hacían con cariño y al chup-chup, sin prisas. Son un clásico que suele gustar a todo el mundo, y funciona bien con múltiples guarniciones: arroz, pimientos asados, cuscús, patatas fritas… Lo más cómodo es que cuando os pongáis a preparar albóndigas, hagáis bastantes de una tacada, y las que no vayáis a consumir ese día, las congeléis (fritas pero sin haber sido guisadas en la salsa) para tenerlas listas en otro momento, y prepararlas con cualquier otra salsa a vuestra elección. En esta ocasión, vamos a prepararlas con salsa de verduritas, con base de zanahorias y cebolla.
Preparación:
Comenzamos preparando las bolitas igual que lo hicimos en esta receta, y por otro lado, nos ponemos con la salsa.
Picamos finamente las cebollas, las zanahorias, el tomate y los ajos. En una cazuela alta ponemos un fondo de aceite de oliva y sofreímos todos los vegetales. Cuando estén pochaditos, añadimos la cucharada de harina y removemos bien. Agregamos ahora el vino y seguimos removiendo durante un par de minutos hasta que se forme una cremita. Incorporamos el caldo y dejamos guisando sin tapar durante unos 20 minutos. Pasamos por un pasapuré hasta dejar la consistencia que nos guste para la salsa.
Ahora ya solo queda añadir las albóndigas (previamente enharinadas y fritas) a la cazuela y guisamos durante unos 10 minutos. ¡¡A la mesa, que se enfrían!!